Es Absurdo, Inoportuno incluso Inquietante.
Es Ecléctico, Distópico e infinitamente Maniqueo.
Es Capcioso, Erróneo y estoy seguro que Irreverente.
Es Obsoleto, Anacrónico, Vintage.
Es Insolente, Hipócrita y/o Fariseo.
Es Antagónico, Puritano y casi Dicótomo.
Es Ególatra, Hedónico, Megalómano, Arcaico, Agónico para sobrellevar sus Ínfulas de poder.
Es tan Etéreo y Volátil como Inútil y Estúpido.
Es Alérgico, Atemporal e Impúdico. Y permitanme decirlo, Lisérgico.
Todo ello condensado en solo dos palabras.
A pesar de todo, Feliz Navidad!
sábado, diciembre 18
Suscribirse a:
Entradas (Atom)